Perfiles: Gonzalo Castellanos V. | Proimágenes Colombia

Escritor, catedrático y productor audiovisual. Gestor de políticas y proyectos sociales y culturales latinoamericanos. Es autor del libro Cinematografía en Colombia, tras las huellas de una industria.
 
Estudió Ciencia Política y Derecho en Colombia; Organización Territorial en el INAP de España; y Gerencia de Proyectos Sociales en el INDES - BID, Washington D.C. En el campo audiovisual, ha trabajado en la construcción y gestión de instrumentos económicos, legislaciones y políticas públicas y sectoriales desde 1998 en Colombia, al igual que en otros países latinoamericanos. Fue catedrático en la Escuela de Cine y TV de San Antonio de los Baños en Cuba, durante varios años en el área de producción. Fue productor asociado de los largometrajes colombianos La sangre y la lluvia, La sociedad del semáforo, En coma, entre otros.
 
Es un latinoamericanista de convicción que ha promovido políticas y proyectos culturales en buena parte de países del continente en campos editoriales, audiovisuales, de industrias creativas, lectura, ecosistema del libro y bibliotecas, patrimonio cultural, patrimonio sumergido, financiación y gestión participativa y comunitaria en cultura. Analista invitado en múltiples foros de artes, construcción de paz, cultura e industrias creativas. Fue gestor del Manifiesto Cultural por la Paz, previo al acuerdo final con las FARC - EP. Recibió el premio latinoamericano Julio González Gómez en ciencias sociales, con el libro Patrimonio cultural, integración y desarrollo en América Latina, del Fondo de Cultura Económica.
 
Autor de libros de ensayo como Cinematografía en Colombia, tras las huellas de una industria, cuya segunda edición, publicada por Ícono Editorial y Proimágenes Colombia, se lanza en la Feria Internacional del Libro de Bogotá (FilBo 2023), en el marco de las actividades de la celebración de los 25 años de la entidad. “Es un libro acerca de por qué un país con tantos líos y horrores decide apostarle al cine, decide apostarle a que más gente se forme en este campo, a que más gente cuente historias locales, a que las producciones foráneas de grandes estudios y plataformas vengan a contratar trabajo de artistas y técnicos nacionales, a que haya personas que inviertan tiempo y dinero en ello. La balanza entre el entretenimiento puro y duro y el “cine guerrilla”, el cine local independiente se ven aquí en forma crítica”, expresó en una entrevista para la Revista Cambio. 
 
En la entrevista también se refirió sobre la consolidación de la industria audiovisual, dentro del contexto regional. “Buena parte de América Latina busca reproducir los instrumentos conseguidos en Colombia. Por ejemplo, las contribuciones o las deducciones por invertir en cine colombiano y descuentos para quienes vengan a contratar talento local, creados en las leyes audiovisuales de 2003 y 2019, pues su factor multiplicador es de tres a uno. Vale decir, el Estado pone uno y le llegan recursos por tres veces más. El caso colombiano es sorprendente. En tiempo récord (20 años): más películas, infraestructuras, trabajo, empleos, escritura de obras; acogimiento de pantallas como plataformas, teatros, televisión; competitividad regional; balanza comercial positiva, aportes al PIB; escuelas y academias, comisiones fílmicas, contratación de locaciones, filmaciones en espacios públicos, en fin”.
 
Última actualización: Abril, 2023.