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El pasado 30 de marzo se dieron a conocer los ganadores de la quinta edición de Guadalajara Construye, el programa destinado a ayudar a los largometrajes latinoamericanos, que una vez rodados, afrontan dificultades en la fase de postproducción y su posterior estreno en salas de cine, que hace parte de la sección de industria del Festival Internacional de Cine en Guadalajara –FICG-. En dicha sección, las películas colombianas La sargento Matacho de William González Zafra y coproducida por Colombia, México y España, recibió cuatro premios, mientras que Gordo, calvo y bajito de Carlos Osuna se llevó dos de los 8 premios concedidos. Ambas películas colombianas son ganadoras en diferentes modalidades de las convocatorias del Fondo para el Desarrollo Cinematográfico –FDC- de Colombia.

"Participar es muy difícil porque es difícil presentar una película inacabada. Cada parte del proceso de construcción de una película es una reescritura. Pero es una suerte poder hacerlo y una maravilla ganar, porque te da el impulso para terminarla", aseguró González Zafra al periódico mexicano La Jornada, luego de recibir el premio. La sargento Matacho recibió el Premio Churubusco, consistente en un proceso data to film que incluye el transfer de datos a negativo 35mm, revelado de ese negativo e impresión de una primera copia positiva; Premio Latinofusion, dotado con 20 mil dólares como adelanto por los derechos de representación internacional de la película terminada; el tercero fue el Premio New Art Sound, 50 horas de trabajo de mezcla en sala THX, certificado por Dolby Digital, THX y proceso de sonido óptico, además del 20% de descuento en el proceso de sonido óptico 35mm, por un valor equivalente a 14 mil dólares; y finalmente, el Premio Titra California, que consiste en el subtitulado de una copia de 35mm y del video, así como la realización de 500 dvds subtitulados para screeners.

La sargento Matacho se desarrolla en Tolima, Colombia, en 1948. Rosalba Velásquez presencia la muerte de su marido. Los distintos jefes de las bandas a las que se une la convierten en su compañera y ella, paradójicamente, engendra vidas mientras siega las de sus enemigos. Muere a manos del ejército colombiano estando a punto de dar a luz un hijo de Desquite, famoso bandolero de la época.

Por su parte, Gordo, calvo y bajito de Carlos Osuna se llevó el Premio New Art Digital, que equivale a 20 mil dólares en servicios de on line y/o corrección de color en resoluciones HD ó 2K y el Premio Fix Comunicación, un off line creativo de un tráiler cinematográfico comercial de dos minutos de duración, el cual está valorado en 10 mil dólares. Cuenta la historia de Antonio Farfán, un funcionario de una notaría que siempre ha creído que el fracaso en su vida se debe a su apariencia: es calvo, bajito y gordo. Aunque su mente nunca calla, su vida transcurre sin mayores contratiempos hasta que llega el nuevo notario: un hombre más gordo, calvo y bajito que él, pero exitoso y querido por los demás.

Los últimos dos premios fueron para la película mexicana La cebra de Fernando León Rodríguez, los cuales fueron el Premio The Lift, consistente en 3 mil dólares en efectivo para apoyo a la postproducción y un viaje redondo de avión para supervisar los procesos que se realicen en el extranjero y el Premio Kodak, que incluye 10 mil pies de negativo con valor de 7.690 dólares, 10 mil pies de sonido con valor de 1.450 dólares y 10 mil pies de material positivo con valor de 1.295 dólares.

Para mayor información se puede consultar la página www.ficg.org.