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El pasado miércoles 25 de julio en Documenta Kassel 2007, Alemania, se realizó el estreno mundial del documental Un tigre de papel del director Luis Ospina (Pura sangre, Soplo de vida). Esta producción fue ganadora de la Convocatoria del Fondo para el Desarrollo Cinematográfico de Colombia en la Modalidad Realización de Documentales. El estreno en Colombia se realizará en el marco del F-11, el Festival de la Revista El Malpensante, posteriormente la película entrará en la cartelera nacional.

Documenta Kassel 2007 es un evento de reconocimiento mundial, que compite con la Bienal de Venecia y la Feria de Arte de Basilea, al cual desde su inicio el pasado 16 de junio arribaron más de 2700 periodistas. La feria se extiende hasta el próximo 23 de septiembre y es también conocida como El museo de los 100 días, participan 113 artistas con más de 500 obras distribuidas en cinco Museos y pabellones en 17.000 metros cuadrados de exhibición. Puede conocer más en sobre Documenta en www.documenta12.de.

Sobre el contenido de Un tigre de papel, tal como explica su sinopsis: La vida de Pedro Manrique Figueroa, precursor del collage en Colombia, no está escrita por nadie, y por una razón poderosa: se parece demasiado a una novela de aventuras, a la vez incompleta y contradictoria, siempre vinculada a las centelleantes incertidumbres de la tradición oral. Utilizando como pretexto la vida y obra de Manrique Figueroa, la película hace un recorrido por la historia desde 1934 hasta 1981, año de la misteriosa desaparición del artista. El film examina las relaciones que han existido entre el arte y la política, entre la verdad y la mentira, entre el documental y la ficción.

Acerca de la presencia del documental en Documental Kassel, Luis Ospina comentó a PANTALLA COLOMBIA “Antes de desaparecer en 1981 el artista Pedro Manrique Figueroa dejó en el Hotel Las Nieves un papelito en el que se alcanzaba a leer de su puño y letra esta frase premonitoria: “Mi narración triunfará”. Qué iba pensar él en ese momento que iba a aparecer en Documenta Kassel 26 años después. Él que había sido rechazado de todos los Salones de Artistas de su país. Nadie es profeta en su tierra. La ironía de todo esto es que no fue por sus obras que el artista llegó a ese lejano país. Fue por una película sobre su vida. El arte copia a la vida y la vida copia a la televisión”. 

Sobre el por qué de este trabajo Ospina añade: “Al tener conocimiento de este artista desconocido, pensé que sería un buen pretexto para hacer un documental sobre los años 60s y 70s con el fin de indagar sobre las relaciones que existen entre el arte y la política, entre la realidad y la mentira, entre el documental y la ficción. Tanto se ha dicho sobre los 60s y 70s que ya no sabemos qué creer. Es un período que ha sido idealizado, mi(s)tificado, y ficcionalizado. Pero por lo menos, en aquella época que ahora parece lejana, había ideales y existía la esperanza de una utopía colectiva.  Fue quizá el último momento en el cual la humanidad pensó que podía cambiar el mundo. .Ahora simplemente nos conformamos con salvar el planeta. Ahora, que no hay ideologías en las cuales podemos creer, sentimos nostalgia de aquellas ilusiones perdidas. ¿Fuimos engañados? ¿Fue todo un sueño? ¿Fue todo real?”.

Si desea mayor información sobre Un tigre de papel puede comunicarse a prensa@blackvelvetlab.com, teléfono 2884919 en Bogotá.